Pie de foto 1: Foto de un pie, mejor dicho.
Pie de foto 2: Fragmento de una escultura colosal de un emperador romano. Sus egos eran tan desmesurados, sentían tanta necesidad de creerse inmortales, que mandaban a los escultores que los inmortalizaran en mármol (una carne eterna) y de un tamaño colosal (para que los demás recordasen lo mínimos que son). Es lo que tiene la representación del poder en el arte.
Pie de foto 3: Miren a su derecha y podrán ver este pie. Bueno, algunos de ustedes habrán visto la serie Lost, pero esto no tiene nada que ver. Cuenta la leyenda que cuando sólo se conserva un pie de un emperador es porque todo lo demás que haya hecho en su vida no habrá sido demasiado importante. Los libros nos dejan constancia de sus hechos, de sus memorias, pero de poco le sirven si al final de tu memoria sólo va a quedar por recuerdo un pie. Por cierto el que están contemplando fue rescatado durante una excavación realizada en los años 70. Continuemos la visita, a la derecha seguimos por el pasillo y nos acercaremos al mosaico de los pájaros...
No sabía tanto sobre los pies de los emperadores, Luis. Como siempre, es estupendo acercarse a esta ventanita y aprender cosas nuevas. Un besote
ResponderEliminarHola Yolanda, bueno, estas entradas son bastante literarias y tienen sus concesiones, pero por ahí van los tiros,je,je. Me gusta que me leas, un beso fuerte y siempre nos quedará Chicago! :)
ResponderEliminarBuenas tardes,
ResponderEliminarSólo comentar que la foto sobre el pie que se encuentra en el museo del Baro de este post está sacada de la siguiente dirección:
http://www.daniel.prado.name/Varios-Viajes.asp?art=227
Lo comento porque soy el autor y para publicar la procedencia de tal foto.
Esta forma parte de mi guía de viajes sobre Túnez
Si pudierais citar el autor y enlazarme, os lo agradecería...
Gracias y un saludo