sábado, 14 de julio de 2012

Las vueltas que da la vida


"Por tu amor
por ti perdí mi alegría,
loco estuve por tu amor,
antes tú no me querías
y ahora no te quiero yo.
¡Las vueltas que da la vida!"

(Fandango cantado por Paco Toronjo)

Tengan cuidado con las vueltas que da la vida, porque van mucho más rápido de lo que ustedes imaginan. El político al que votaron ayer hoy les dirá que no puede cumplir sus promesas electorales, pero que está haciendo lo correcto. Las ideas en las que creyó desde su infancia se han venido abajo, eran meros cuentos morales para evitar que lo inmundo entrara en sus cabezas, para sostenerles cuando les falte el aliento. Los amigos les defraudaron, los amores les engañaron, la vida se les hizo cuesta arriba. Quien te dijo que te amaba más que a su vida, que por ti lo daría todo, ahora te engaña, prostituye las promesas que te hizo y te hace sentirte fatal. No confíes en nada, ni siquiera en ti mismo, ni siquiera en la palabra. No busques, no camines, resígnate a contemplar el mundo, un estercolero sin ideas, sin ilusiones, donde el dinero es el único dios verdadero, la verdad está mancillada, los valores podridos y en decadencia y solo coleccionas una serie de desencantos. ¿Tu primer fracaso? Haber nacido... ¿el último? Haber leído este mensaje.

Perdonen el pesimismo. Buenas noches y buena suerte.

Nota a pie de página: El autor no se hace responsable de los comentarios vertidos por los diferentes 'yo' que adopte la misma persona que escriba estas líneas. De este elogio del pesimismo y de esta celebración del desencanto hay pasajes que comparto pero no soy tan radical (adviertan que hoy una diputada dijo que se jodan y estas letras no dejan de ser el espejo deformado en que le contesto), siempre hay un brote de esperanza, una flor entre la basura, un rayo de luz entre tanta oscuridad que nos acompaña... siempre acabamos saliendo adelante... Y ahora me voy a callar y que hable de nuevo Paco Toronjo... mientras haya un fandango para cantar una verdad seguirá habiendo esperanza en el pueblo, en la gente sencilla, que afortunadamente aún no está contaminada por todo lo malo, que es mucho...


"Cantando,
ya voy pa los setenta,
cincuenta años cantando,
pa mí ya el tiempo no cuenta,
y sigo con mi fandango
mientras mi corazón sienta".

(Fandango cantado por Paco Toronjo)