lunes, 23 de abril de 2012

La necesidad de un libro


Un libro te necesita, como tú le necesitas a él. Hoy es el Día Mundial del Libro y sí, le voy a dedicar unas líneas a este objeto único en la cultura, necesario para la formación, imprescindible para el conocimiento. Para un amigo, un tesoro, al que le han dedicado muchas palabras de elogio. Aunque también vive tiempos de cambio en la era de la informática, Internet y las redes sociales. Pero no teman, siempre se seguirá leyendo, no importa tanto el formato, creo que ambos pueden coexistir, y soy favorable al libro electrónico, aunque personalmente me quedo con el encanto del libro de papel, ese que tiene olor y por el que el tiempo va pasando, como pasa sus hojas cada lector.

El libro tiene un componente romántico único, es una invitación, un puente, nos lleva a los lugares más insospechados quedándonos en el mismo sitio. Pese al tremendo impacto de la cultura audiovisual en nuestras vidas, especialmente para los más jóvenes, sigue siendo todo un placer estar en el rincón favorito de nuestras casas o al aire libre leyendo un libro, evocando sensaciones y lugares mediante palabras, sin necesidad de otros apoyos. El mundo bibliográfico es muy amplio y aunque los libros más leídos suelen ser de ficción, también hay un caudal de conocimiento increíble en obras de divulgación, de historia, en ensayos, en facsímiles, en ediciones historicistas, en bellos libros de arte, en coquetas ediciones de temas provocadores... el universo de los libros es (casi) tan amplio, variado e inagotable como el universo mismo.

¿Saben una cosa? Nuestras propias vidas se podrían contar mediante los libros. Desde las primeras lecturas infantiles, con personajes, muñecos, vampiros o princesas, después pasamos a los relatos infantiles, con la aproximación a maestros de la literatura como Julio Verne, Mark Twain o Daniel Dafoe. La edad universitaria y los gustos nos van a llevar por caminos muy diferentes, que abarcan desde la literatura medieval europea hasta los autores estadounidenses contemporáneos de moda. En el libro nos iremos encontrando y descubriendo, nos haremos haciendo, seguiremos creciendo y siempre tendremos necesidad, los lectores de verdad, los que necesitan la lectura como una función vital básica más, durante toda una vida. Incluso algunos, un poco insensatos, algo geniales e incluso con evidentes muestras de extravagancia mental, se atreverán (me incluyo) a intentar ser escritores, aunque solo sea en un blog o en las redes sociales.

Los formatos irán cambiando, como los tiempos, las sociedades y el propio ser humano, pero el libro tendrá la última palabra.

(Esta entrada está dedicada a Loli Ruiz, a quien siempre tengo un libro pendiente por dedicarle)

1 comentario:

  1. Una entrada preciosa, ambos tenemos un amor profundo por la letra impresa, entre otros amores culturales, y sí es cierto, siempre se leerá, lo que menos importa es el medio a través del cual se haga, aunque el libro sea siempre (para mí) la mejor opción: sentir su peso y olor forman parte de la aventura de leer. Gracias, Luis

    Tu amiga Loli

    ResponderEliminar